Elena Agúndez Rodríguez

Soy de esas que olvidan los 14 de febrero. Que prefiere no pensar en el futuro aunque inevitablemente lo hago muy a menudo. De las que en las cosas importantes no se consigue concentrar, y es que siempre tengo un millón de cosas que me gustaría hacer. De las que actualiza el tuenti y el Facebook cada segundo y de las que tiene la música sonando desde que llega a casa. De las que hacen listas con la ropa que se quieren comprar aunque luego no lo hagan; me paso las tardes leyendo blogs y mirando catálogos y como me de por deprimirme soy de las que se las da muy bien echarse las culpas. Cuando voy de viaje soy de esas que hace la maleta cinco minutos antes de salir. De las que las encanta escuchar las historias de los demás e intentar aconsejarles lo mejor que saben; tengo muchos sueños y deseos pero a la hora de la verdad soy muy realista. Cuando me quiero olvidar de algo soy de las que ese algo no deja de dar vueltas por su cabeza; soy de las que las cabrea que pasen de ellas y de las que se comen el coco por eso. Suelo llegan media hora tarde y sonrío mientras pido perdón. Acepto que soy la más cabezona del planeta y que no me vas ha hacer cambiar de opinión tan fácilmente; que las cosas nunca salen como uno espera y es que soy de esas que tienen mucha facilidad para estropearlo todo. Que soy el ser más imperfecto y reconozco todos y cada uno de mis defectos y es más, soy de esas a las que las gusta que si hacen algo mal se lo digan a la cara y que odian que las cosas se queden a medias. En conclusión, me suelo equivocar, suelo caer en los mismos errores y reconozco que no soy perfecta.