Quiero que me oigas, y no me juzgues. Que
opines, que me aconsejes. Que confíes en mí, pero sin exigirme. Que me ayudes, sin
intentar decidir por mí. Que me cuides, sin llegar a anularme. Que me mires y
proyectes tus pensamientos en mí. Que me abraces pero sin asfixiarme. Que me
animes, sin empujarme. Que me sostengas, sin hacerte cargo de mí. Que me
protejas, sin mentiras. Que te acerques, sin invadirme. Que conozcas todo de mi
incluso lo que más te disguste, que lo aceptes y no pretendas cambiarme. Quiero
que sepas, que hoy, puedes contar conmigo. Sin condiciones.
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