domingo, 30 de octubre de 2011

Las casualidades de la vida llevan a la gente a toparse con alguien a quien no deseas ver y en cambio acabas reviviendo un sueño.
Dicen que el destino es quien baraja las cartas pero nosotros somos los que jugamos.

lunes, 24 de octubre de 2011

Sé que no se quedarán en simples palabra.


A mí me gusta la Vespa, a mí me gusta correr y me parece bonita la vespa para una mujer. Toda mujer bien soltera en Vespa debe montar y en la primera carrera a un hombre debe pescar y si él es interesante dejele subir. Porque a mi me gusta la Vespa!
(es un sueño que algún día cumpliré).

"La historia de cada uno de nosotros. Todos a coleccionar".

domingo, 23 de octubre de 2011

Girls' party.













"-¿Cómo puede el mundo seguir bailando así? - digo mientras me tumbo borracha bajo un cielo de estrellas".

jueves, 20 de octubre de 2011

Puede que en el fondo si que me apetezca.

Te quiero contar un secreto, no tengo carisma, ni  tengo ganas de nada, ni tiempo para hacer lo que me apetece, ni siquiera para reírme contigo. Lo único que quiero es bailar sola entre una multitud, sentirme acompañada pero bailar sin que nadie mire, levantando los brazos, moviendo los pies y sonriendo a nadie, cada uno estará a lo suyo yo bailare sola. Pero es que te veré y me quedare quieta mirándote, por suerte eso no pasara aunque un poquito si que me apetece, adrenalina creo que es.

martes, 18 de octubre de 2011

Neuroanatomía de un beso francés (beso con lengua).

Para que un beso se de correctamente son muchos los circuitos neuronales que se han de activar. Este tipo de beso, el beso francés o beso con lengua, suele comenzar cuando se sitúa uno frente al otro, al igual que en el resto de tipos. Poco a poco nuestros labios se van juntando. En ese momento no nos damos cuenta pero nuestros 34 músculos faciales son necesarios para realizar bien este beso, además de otros 134 músculos extra que configuran la postura en el resto del cuerpo. En este tipo de besos se produce un intercambio de saliva. Y Además representa el erotismo, el juego del mero acto sexual. Una cantidad de neuronas que desconectan de todo lo que pasa por nuestras cabezas segundos antes, se dedican ahora a la tarea de guiar la boca, la velocidad de su lengua y la trayectoria adecuada. Así puede pasar el tiempo, uno jugando con los labios del otro, mordiéndose la lengua, jugando con ella, notando sus respiraciones y el calor del aliento.


lunes, 10 de octubre de 2011

Su sonrisa.

Quizás esto sea una locura, le conozco desde hace poco, no más de dos semanas, pero es la locura más bonita que he hecho nunca. Consigue que mis sonrisas rocen las orejas, verle sonreír, con esa sonrisa que enamora hasta un ciego, me alegra el resto del día. Consigue que hablando con él, me olvide de todo, incluso pierda la noción del tiempo. No hay día que no sienta la necesidad de hablar con él, de verle, de mirarle ... Su sonrisa, con su sonrisa consigue que se me pare el mundo, que no piense nada más en ese momento, y es que, es perfecta, como él. La locura más bonita.


jueves, 6 de octubre de 2011

Nosotras y ellos.

"He tardado muchos años de mi vida en llegar a comprender que si me gustan los hombres es precisamente porque no les entiendo. Porque son unos marcianos para mí, criaturas raras y como desconectadas por dentro, de manera que sus procesos mentales no tienen que ver con sus sentimientos; su lógica, con sus emociones, sus deseos, con su voluntad, sus palabras, con sus actos. Son un enigma, un pozo lleno de ecos.
Se habrán dado cuenta de que esto mismo es lo que siempre han dicho los hombres de nosotras: que las mujeres somos seres extraños e imprevisibles. Definidas socialmente así durante siglos por la voz del varón, que era la única voz pública, las mujeres hemos acarreado el sambenito de ser incoherentes e incomprensibles, mientras que los hombres aparecían como el más luminoso colmo de la claridad y la coherencia. Pues bien, de eso nada: ellos son desconcertantes, calamitosos y rarísimos. O al menos lo son para nosotras, del mismo modo que nosotras somos un misterio para ellos. Y es que poseemos, hombres y mujeres, lógicas distintas, concepciones del mundo diferentes, y somos, las unas para los otros, polos opuestos que al mismo tiempo se atraen y se repelen.
No sé bien qué es ser mujer, de la misma manera que no sé qué es ser hombre. Sin duda, somos identidades en perpetua mutación, complejas y cambiantes. Es obvio que gran parte de las llamadas características femeninas o masculinas son producto de una educación determinada, es decir, de la tradición, de la cultura. Pero es de suponer que la biología también debe de influir en nuestras diferencias. El problema radica en saber por dónde pasa la raya, la frontera; qué es lo aprendido y qué lo innato. Es la vieja y no resuelta discusión entre ambiente y herencia.
Sea como fuere, lo cierto es que hoy parece existir una cierta mirada de mujer sobre el mundo, así como una cierta mirada de varón. Y así, miro a los hombres con mis ojos femeninos y me dejan pasmada. Me asombran, me divierten, en ocasiones me admiran, a menudo me irritan y me desesperan, como irrita y desespera lo que parece absurdo. A ellos, lo sé, les sucede lo mismo. [...] A veces se diría que no pertenecemos a la misma especie y que carecemos de un lenguaje común.

El lenguaje, sobre todo el lenguaje, he aquí el abismo fundamental que nos separa. Porque nosotras hablamos demasiado y ellos hablan muy poco. Porque ellos jamás dicen lo que nosotras queremos oír, y lo que nosotras decimos les abruma. Porque nosotras necesitamos poner en palabras nuestros sentimientos y ellos no saben nombrar nunca lo que sienten. Porque a ellos les aterra hablar de sus emociones, y a nosotras nos espanta no poder compartir nuestras emociones verbalmente. Porque lo que ellos dicen no es lo que nosotras escuchamos, y lo que ellos escuchan no es lo que nosotras hemos dicho. Por todos estos malentendidos y muchos otros, la comunicación entre los sexos es un perpetuo desencuentro.

Y de esa incomunicación surge el deseo. Siempre creí que a lo que yo aspiraba era a la comunicación perfecta con un hombre, o, mejor dicho, con el hombre, con ese príncipe azul de los sueños de infancia, un ser que sabría adivinarme hasta en los más menudos pliegues interiores. Ahora he aprendido no sólo que esa fusión es imposible, sino además que es probablemente indeseable. Porque de la distancia y de la diferencia, del esfuerzo por saltar abismos y conquistar al otro o a la otra, del afán por comprenderle y descifrarle, nace la pasión. ¿Qué es el amor, sino esa gustosa enajenación; el salirte de ti para entrar en el otro o la otra, para navegar por una galaxia distante de la tuya?"

Rosa Montero.

lunes, 3 de octubre de 2011

Normalmente hacemos las cosas por cumplir, no porque de verdad sean ciertas.

Pero no lo hice porque dude de mi mismo, te dí lo que creí que querías en vez de lo que me parecía mejor. Pero esto es mejor, significa algo para mí y no sé, creo que también sigificara para los demás.

domingo, 2 de octubre de 2011

Comienza octubre con un buen fin de semana.







7º Aniversario de Jaleo.

(:

Ríe hasta que te duela la barriga, salta más alto que nadie, baila bajo la lluvia, disfruta de cualquier tontería, rebózate por la arena, sal a la calle con tu mejor vestido, come todo el chocolate del mundo, tírate a una piscina con ropa, cómprate esos zapatos que tanto te encantan, haz el tonto, posa como una modelo, escucha esa canción todas las veces que haga falta, olvídate de los problemas, se feliz, por cada lágrima pon una sonrisa, espanta a las palomas del parque, ve a la playa a tomar el sol, sé diferente, vive tu vida, llama por teléfono y estate 3 horas hablando, pasa de lo que digan tus padres, sáltate las reglas, pon la música tan alta que moleste al vecino, usa el perfume más caro, ponte guapa. Piensa que la vida esta para vivirla no la malgastes preocupándote de absurdos problemas que nada tienen que ver contigo, disfruta con cada persona que conozcas, con cada locura.